¿Qué debo saber antes de comenzar mis clases de canto?

10 preguntas con sus respuestas para reflexionar sobre lo que debemos saber antes de comenzar nuestra clase de canto.
Por: ELIZABETH DOLINSKA

  1. ¿Cómo elegir un buen maestro de canto?
    Para tener claro como elegir mi futuro maestro de canto, lo primero que debemos hacer es llevar apuntadas todas las dudas y cuestiones que nos interesa saber sobre como serán las clases que vamos a tomar y en que consisten.
    Debemos exigir que se nos explique con claridad cual es la técnica vocal que propone el maestro y como se llevarán a cabo los ejercicios y que resultados se obtienen de ellos.
    De esta forma no solo nos enteraremos de la propuesta y lo que vamos a tener que hacer para aprender a desarrollar la voz de cantante, si no que podremos evaluar el nivel de conocimiento del maestro que elijamos por fin para nuestro aprendizaje.
    El maestro debe desarrollar y exponer desde un método claro y concreto la forma de trabajo que propone, ya que sin método y sin claridad nos se puede estudiar ni aprender nada en la vida.
  2. ¿Qué es la “técnica vocal” y cómo se trabaja?
    La técnica vocal es la tarea indicada que debe realizar un futuro cantante, reconociendo y aprendiendo con nuevos movimientos de su cuerpo como lograr desarrollar una excelente voz musical.
    Este trabajo consiste en que se debe descubrir una nueva forma de respiración con el uso y reconocimiento de la membrana muscular que se llama diafragma, para ello hay que aprender a utilizar la respiración baja y desarrollar mucha fuerza desde el diafragma hacia abajo.
    Esta fuerza está focalizada puntualmente en las piernas, ejerciendo con los pies mucha fuerza hacia el piso.
    El pecho debe ensancharse y las costillas también y además se debe considerar mucho la posición de la columna vertebral hasta llegar a una relajación total de el cuello para que la voz sea libre y potente.
    Es muy importante tomar en cuenta que la voz humana es un “instrumento de viento y de cuerda”, por lo tanto este trabajo del sistema respiratorio deberá ser combinado a la perfección con un fuerte trabajo de dicción, o sea que se debe hacer un esfuerzo importante con los movimientos de la cara para que desde la pronunciación de las letras no solo se produzca una importante apertura de la garganta, si no que ejerciendo un movimiento con el paladar blando hacia arriba, se logre que lo sonidos vibren en los huesos resonadores (pómulos y cráneo).
    De esta forma y una vez realizada esta ardua y apasionante tarea, podremos comprobar que desde nuestras dos cuerdas vocales y una buena columna de aire, llegaremos a construir un instrumento con por lo menos dos octavas de registro y una gran potencia en la voz y así descubrir que nuestra voz resultará ser un instrumento musical perfecto de cuerda y de viento.
  3. ¿Cómo debo cuidar mi voz?
    El primer punto que voy a considerar es para aquellos que desde pequeños aman el canto y cantan todo el día.
    Así es que esto es válido para los niños también.
    Cuando escuchamos cantar a aquellos que nos enamoran desde los medios de comunicación y cualquier sistema de audio, no es conveniente cantar sobre la grabación que estamos escuchando.
    Ya que de esa forma nos estamos adecuando a las notas del que está cantando y a su registro vocal y no siempre es el que nos pertenece.
    Las personas (tanto niños como adultos